Llovemos amor. Del cuaderno a la Red sin red.

Ayer por la noche recogí
La ropa del tendal
Para que no se mojara de nuevo
Estaba suave, deliciosa
Porque las nuebs habíamos llovido amor.

Esta mañana lloré al recordar el Gran Desastre y
Sólo deseé poder perdonarme algún día al fin
Abri el grifo de la ducha
Cuando fui a darme cuenta
El agua llovía amor por todo mi cuerpo
Inocente había mojado también mi cabeza
Llovió sobre mí el perdón que recogen las montañas
Besé a mis hijas, a quienes tantas deudas me unen
Supe que por fin todas las cuentas con ellas
Iban a quedar saldadas
Envié un mensaje a mi amor nuevo
Porque le echo de menos aunque no lo necesite
Solo quiero tener esos instantes de abrazos infinitos
Para hacerle saber y hacerme saber que
El amor llega de forma ineludible
La alegría clama por imponerse
La felicidad es algo inevitable
La libertad nos ha elegido para ser sus estandartes
El tiempo nuevo no comienza
Ya ha llegado y
Solo nos queda picar piedra
Para sacar a la luz las joyas
Que estaban escondidas en las rocas de nuestros corazones
El futuro llama a las puertas
De este presente ideal e inevitable
Yo tengo en la mano la llave de oro
Voy abriendo todos los portales
Desde donde la luz inmensa
Ya no nos ciega
Porque podemos soportar su mirada frontal
Y caminar por fin en el fuego sin quemarnos.

13 de marzo de 2011

Comentarios

Entradas populares de este blog

Inamovibles. Del cuaderno a la Red sin red.

Encuentro fortuiro. Del cuaderno a la Red sin red.

La reinvención en tiempos convulsos