Entradas

Mostrando entradas de enero, 2010

Malos tiempos para el periodismo

Me pregunto si soy periodista o ya no lo soy. Últimamente esta profesión ya no es lo que era. Todos intentamos hacerlo lo mejor posible, pero con eso no basta. Hasta el más listo cae en trampas. Hasta al más agudo le manipulan. Este oficio intenta obtener información para contar la realidad. Para ello, buscamos la verdad. Pero en los últimos tiempos, la verdad que obtenemos en nuestra búsqueda no es más que una parte de la verdad, porque el resto se hurta a nuestros ojos por un sistema parecido al de la tinta del calamar: te ponen algo delante para que te fijes en eso y no veas lo que hay detrás. Y con una parte de la verdad no podemos explicar toda la realidad. Ya no es que reproduzcamos mentiras que nos ofrecen nuestras fuentes como verdades, que también ocurre. Es que lo que diversas fuentes ofrecen como verdad a veces no lo es, aunque incluso nuestras fuentes piensen con toda su buena intención que sí lo es. Es difícil filtrar y separar una cosa de otra, y además buscar qué parte d

La pena negra

Zombies en la tierra de los zombies almas perdidas en cuerpos dormidos almas en vuelo lejos de sus cadenas tierra abierta con entrañas de hormigón raíces clavadas con dolor al magma ojos profundos con huellas de infinito miradas ciegas y palabras huecas pasos sin camino ni destino vidas rotas en hogares derrumbados paredes impasibles de sepulcros blanqueados brazos elevados al azul indiferente gritos sordos y discursos vanos riega la lluvia del amor infinito el hedor de las lágrimas en párpados secos hora de construir sobre la nada hora de llenar el corazón de esperanza donde el dolor truena el relámpago alumbra un futuro imposible se abre paso entre las ruinas causa sin razón canción del viento de la semilla muerta crece el futuro

Las niñas se pegan

Vaya cómo se las gastan nuestras niñas! La última moda entre las adolescentes es la de pegarse. Por lo menos, en la zona donde vivo, que es el madrileño barrio de San Blas, subbarrio de Las Musas, conocido antes como la "Pequeña Moraleja". Ignoro cómo se las gastan en otras zonas más pijas, pero me temo que no mucho mejor. Hete aquí que la revolución femenina ha llegado a su culmen, a sus más altas cimas de la miseria, que diría Groucho. Porque se trataba de conseguir la igualdad de trato, no de ser iguales a los hombres en lo peorcito que ellos tienen: su tendencia a la agresividad física, fruto de estar bajo la imparable droga de la testosterona desde su etapa fetal. Los niños se pegan, juegan a lo bestia, y cualquiera que ha tenido niños y niñas se ha dado cuenta de que desde pequeños son muy distintos. Pero resulta que ahora las niñas, al sentir la embriaguez hormonal de la adolescencia, en vez de dedicarse a coquetear, se ponen agresivamente cachondas, y la emprenden a l

Pájaros de mal agüero

Hoy, en el periódico en el que trabajo, léase El País, tenemos un ejemplo de lo que no es creatividad. Ni invención. Ni originalidad. Y aun encima, lo es de lo que no debemos leer para construir nuestro futuro con libertad. Es decir, con creatividad. Se trata de un artículo de Vicente Verdú titulado "Aporías de la nueva década (1)". Más abajo pongo el enlace, para que no os perdais buscándolo, porque no se ha incluido en la web, sino sólo en lo que la web refleja de la edición impresa. Por algo será. En él, el autor lo único que tal vez nos enseña de nuevo es el significado de la palabra aporías. Después, recuerda algo de historia. Para quienes desconozcan que las cosas ocurrieron así, está bien contarlo. Sí, fueron así. Sin embargo, apunta a una visión catastrofista al final del artículo que muchos pueden interpretar, contestando a las preguntas que deja en el aire, como que estamos abocados a una nueva guerra mundial. Esa que nos dejaría de nuevo en la Edad de Piedra. Creo